Blog de Kidsmile

FONOAUDIOLOGÍA Y ODONTOPEDIATRÍA

Por: Kidsmile

19

Aug

FONOAUDIOLOGÍA Y ODONTOPEDIATRÍA
FONOAUDIOLOGÍA Y ODONTOPEDIATRÍA
 
                        Es más frecuente que los padres lleven a sus hijos al dentista que al fonoaudiólogo. El odontopediatra esta capacitado para detectar alteraciones del sistema estomatognático (músculos de la masticación, lengua, labios, dientes, huesos de cráneo y cara), por lo tanto, es recomendable escuchar al dentista cuando nos sugiere una interconsulta al fonoaudiólogo.  Existe la posibilidad de alguna alteración a nivel de este sistema que tendrá importantes repercusiones a nivel del equilibrio de éste. Se podrían desarrollar alteraciones a nivel respiratorio, deglutorio, masticación y articulatorios. El equilibrio de la actividad muscular influyen las relaciones intermaxilares y la oclusión dentaria. Lo importante es la oportuna derivación y pronto tratamiento. 
 
Alteraciones que podría detectar el odontopediatra y que pueden ser tratadas por el fonoaudiólogo son, entre otras, las siguientes: 
 
Alteraciones en la fonoarticulación
Los movimientos necesarios para la correcta articulación de algún fonema deben ser secuenciados, coordinados que participación específica de algunos músculos y órganos fonoarticulatorios, además de una adecuada coordinación fonorespiratoria,  si existe algún desequilibrio de estos elementos, el resultado final no será el esperado.
 
Respiración oral o bucal
La respiración correcta debe ser sólo nasal. Al ser oral el aire ingresa frío e impuro y no esta preparado para un adecuado ciclo respiratorio.  Además, ocasiona mala oxigenación que puede llevar a problemas de atención y concentración los que repercuten en problemas de aprendizaje. Por otro lado el ser respirador oral lleva a tener una postura corporal inadecuada y disminuye el tono muscular de estructuras indispensables para  la correcta articulación. 
 
Malos hábitos orales
Es una acción errónea repetida que se realiza de una manera automática. El uso reiterado de chupete, mamadera, succión digital (chuparse el dedo), interposición lingual, entre otros, podrían provocar  desviación de dientes, posición descendida de la lengua, falta tonicidad labios, alteración de la mordida y presencia de caries.
 
Fonoaudióloga Catalina Valenzuela Balic